Rehabilitación de sótano y planta baja. Solución a las humedades

En esta rehabilitación de sótano y local comercial se ha logrado recuperar la construcción tradicional, rescatar los forjados originales y resolver los problemas de humedad.

Se trata de un típico edificio madrileño de principios del siglo XX, con planta sótano sobre muros de ladrillo y estructura de madera mixta, con pilares de fundición en la planta baja para lograr un espacio más diáfano en el que exponer bolsos y artículos para el viajero.

La fachada principal a la calle es de sillería de granito, con amplios ventanales que dan iluminación y sirven de escaparate.

El local se encontraba completamente panelado. Se habían forrado los muros perimetrales de carga de ladrillo visto, y se había hecho una división del local. También se había tabicado la bajada a planta sótano y los respiraderos del sótano en fachada estaban cancelados.

La rehabilitación del sótano debía solucionar los problemas de humedad, causados sobre todo por la falta de renovación del aire, como se pudo ver después. Los forjados, de estructura de vigueta de acero y revoltón, estaban afectados, con caída del entrevigado y se estaba produciendo oxidación en el metal. En los muros había disgregaciones en la fábrica.

La intención del proyecto del local para Humboldt era disponer de un espacio lo más diáfano posible, en el que la arquitectura y la estructura del edificio formasen parte de la decoración. La escalera de comunicación entre ambas plantas permite que el sótano sea un lugar de exposición, y tanto en éste como en la planta baja había pinturas decorativas que podían preservarse.

En una rehabilitación de sótano lo primordial es favorecer la ventilación para lograr que la no se acumule la humedad, por lo que hacer que el espacio del local se unifique ganaba en los dos frentes.

Una vez eliminados los paneles, el ladrillo estaba en buen estado, aunque se detectaba un poco de disgregación. La aplicación de un barniz especial para ladrillo ha sido suficiente para parar el deterioro.

En la planta baja el espacio se organiza en torno a los pilares de fundición y a la escalera de bajada, con barandilla metálica muy ligera.

El techo de la crujía más próxima a la calle tiene una decoración de madera recuperada de las ruinas de un edificio cercano, con viguetas y casetones de madera decorados con motivos goyescos.

En el sótano se han conservado las pinturas en los revoltones y en algunas zonas de enlucido, combinado con la decoración propia de la tienda.

Este es un ejemplo en que los problemas de humedad en una rehabilitación de sótano se resuelven favoreciendo la ventilación, no realizando costosas inversiones en productos hidrófugos innecesarios.

Además la rehabilitación ha recuperado un patrimonio arquitectónico y constructivo de gran valor en el Madrid del Rastro, y lo ha puesto al alcance de la vista de todos. Merece la pena una visita.