Originalmente era el convento de la orden femenina de San Francisco de Sales, fundado en 1.748 por la reina Bárbara de Braganza.
Se realizan las obras de rehabilitación de la fachada del convento, hoy parroquia de Santa Bárbara.
El proyecto lo realizó Francois Carlier, aunque fue desarrollado por Francisco Moradillo, quien introdujo modificaciones en el diseño. La composición original se complementó con dos torres y el frontón ganó importancia.
La fundación del convento tenía por objeto tanto crear un colegio para educación de niñas nobles como proporcionar un lugar de retiro y enterramiento a la reina, esposa de Fernando VI. Al no haber tenido descendencia, esta noble portuguesa no tenía derecho a reposar en el Panteón de Reyes de El Escorial.
La fachada, realizada en granito, está dividida en siete partes en vertical, separadas por pilastras. La altura se divide en dos niveles, el superior coronado por un frontón, tras del cual sobresale la cúpula.
La reconstrucción de la parte conventual fue para albergar el Tribunal Supremo. Por esta razón del proyecto original hoy sólo se conserva la iglesia.
Al encontrarse en un terreno alto, y por los materiales y la composición del edificio, se lo conocía como el Pequeño Escorial. Desamortizado por Mendizábal, el conjunto monástico sufrió varios incendios. En la fachada de granito ocupan hornacinas y recuadros relieves y esculturas de mármol de Carrara. Mucho más trabajable que el granito, el mármol permite un tallado con alto grado de detalle.
Una primera inspección debida a la caída de un elemento escultórico alertó sobre el deterioro de la fachada. Especialmente se pudo ver la gran acumulación de deshechos sobre y tras las esculturas. Incluso una de ellas estaba desplazada de su lugar.
Las obras de rehabilitación de la fachada de Santa Bárbara
La rehabilitación de la fachada de Santa Bárbara tiene por objeto la limpieza, consolidación y reparación de todos los elementos. El estudio de arquitectura de Mar Fernández es el que ha desarrollado tanto el plan director como el proyecto y obras actuales de fachada.
El mármol de Carrara de elementos escultóricos de pequeñas dimensiones estaba muy degradado. Algunos salientes, como manos de figuras, se deshicieron al tocarlos.
Además de lo anterior, se descubrió una fisura longitudinal en el eje de la fachada. Ésta se marca en la clave del arco principal de la entrada.
Aquella puede deberse a un asentamiento lateral del edificio hacia el oeste, debido al cambio de nivel del terreno por la apertura de nuevas calles. Hay que tener en cuenta que el conjunto conventual estaba fuera de la ciudad y la topografía ha variado.
La fisura se manifiesta en el grupo escultórico de la visitación, formado por tres piezas. La parte lateral se ha desplazado por el movimiento de la fachada.
La rehabilitación de la fachada de Santa Bárbara tiene la intención de eliminar intervenciones anteriores perjudiciales. El adhesivo de fijación de las protecciones antipalomas resulta dañino a la piedra.
Del mismo modo, los rejuntados con mortero de cemento, realizados en el siglo XX han de ser retirados.
La contaminación ha provocado también la degradación del granito, sobre todo en las bases de los arcos de acceso.
La visita a las obras de rehabilitación de la fachada de Santa Bárbara nos permiten acercarnos a la misma. De esta manera se puede examinar, analizar y apreciar los trabajos de restauración. Y finalmente observar muy de cerca los conjuntos escultóricos que habitualmente no están al alcance de nuestra vista.
Autora: Ana Fernández-Cuartero Paramio
1 comentario en “Rehabilitación de la fachada de Santa Bárbara”
Magnífica entrada ¡como estar subido en el andamio! ¡Enhorabuena!
Los que no conozcan el interior del templo, y deseen visitarlo, que no se pierdan las tumbas de Fernando VI y Bárbara de Braganza, y el epitafio de Carlos III dedicado a su hermano. Lo digo con conocimiento de causa: mis restos descansan en la nave lateral opuesta.